La Odontología Rehabilitadora, se encarga de “habilitar” o devolver la función y estética de algunas o todas las piezas dentales ausentes o en mal estado.
La rehabilitación oral para su tratamiento combina terapias en base a prótesis fijas, prótesis removibles, prótesis implanto retenidas o implantosoportadas, operatoria y oclusión.
La Odontología Rehabilitadora, es la especialidad requerida cuando necesitamos reparar o reponer dientes de la boca de un paciente.
Generalmente nos encontramos con la necesidad de afrontar este tipo de tratamiento en pacientes que han desgastado la mayoría de sus dientes (por procesos bruxistas o ataques ácidos como la bulimia), o en pacientes que a lo largo de su vida han perdido varios dientes que no han sustituido, y los movimientos y el daño de los dientes restantes hacen que sólo podamos recuperar su salud y la estética deseada mediante una restauración integral.
Este tipo de tratamientos incluyen aquellos pacientes que por distintos motivos han perdido dientes o es necesario extraerlos. En esos casos la rehabilitación se llevará a cabo mediante la colocación de implantes, prótesis completas o combinaciones de ambos.
Cuando un diente se lesiona, se deteriora o incluso pierde la corona, se necesita una restauración sólida para reconstruir la pieza dentaria. La corona está diseñada para cubrir lo que queda del diente y protegerlo, al mismo tiempo que devuelve su forma y color original, es una suerte de funda que se coloca sobre un diente dañado o fracturado. Una protésis fija o corona, también está indicada para mejorar la estética, forma, alineación y/o ubicación de una pieza dentaria. Generalmente se fabrican con porcelana o cerámica, aunque también se pueden utilizar nuevas aleaciones estéticas.
Alternativamente, los puentes dentales son estructuras que se utilizan para reemplazar una o más piezas dentarias perdidas utilizando como “apoyo” dientes adyacentes sanos. Por lo general, están fabricados de metal porcelana. El metal será el núcleo de la estructura y otorga las propiedades mecánicas necesarias para soportar las fuerzas masticatorias mientras que, la porcelana, queda en la parte externa aportando las propiedades estéticas (forma y color).
La durabilidad de las coronas y puentes en condiciones ópticas de uso e higiene oral, va desde los 2 a los 5 años o más. Aquellos tratamientos que fracasan de forma precoz generalmente se le atribuyen patologías infecciosas que podrían prevenirse si los controles e indicaciones dadas por el profesional, se mantienen.
Los implantes dentales son tornillos de titanio, que han sido sometidos a un tratamiento especial en su superficie para garantizar su óseointegración al hueso; son elementos biocompatibles y aptos para ser implantados en el cuerpo humano, que sustituyen las piezas dentarias perdidas y/o ausentes. La segunda parte de este tratamiento corresponde a la carga del implante, ubicado al interior del hueso, con una corona, puente y/o prótesis.
Los implantes dentales son una opción segura para sustituir dientes perdidos una vez que se ha realizado todo tratamiento posible y duran más de de 20 años en el 90% de los casos. Además de devolver la pieza dentaria, los implantes evitan la pérdida del hueso y permiten mantener una oclusión funcional y balanceada.
La restitución de las piezas dentarias mejora la calidad de vida e incrementa el autoestima y confianza de nuestros pacientes por lo que, en Pfister Ortodoncia, contamos con dicho procedimiento.